Formula Anti-Ácaros


Categoría: Pandilla Juvenil (1ro. 2do. y 3ro. de nivel Secundaria)
Área de participación: Divulgación y enseñanza de la ciencia

Asesor: Marisa Calle Monroy.

Miembros del equipo:
Emanuel Hernández Saldaña (), TIKAL,
Héctor Romero Argueta (), TIKAL,
Andrés Torres Aguilar (), TIKAL,

Resumen

Pregunta de Investigación

¿Como elaborar un producto que elimine los ácaros en prendas y muebles?

Planteamiento del Problema

En la actualidad ay enfermedades como la dermatritis atropika, asma y alergias respiratorias así como muchas otras, esto es lo que produce el polvo y con ello el acaro, estos aracñidos son muy pequeños no se detectan a simple vista y estos habitan en muebles esquinas,etc; esto donde ay mas cantidades de polvo.
El ser humano es alérgico a estos aracñidos tanto que las 25 mil especies son mortales para nuestros pulmones y nariz.

Para nuestra desgracia un acaro es capas de producir 20 partículas fecales capases de provocar enfermedades que ya comentamos, de cualquier manera, su numero es muy superior al de todos los demás vivos juntos

Antecedentes

Acari o Acarina comúnmente denominados como ácaros, son una subclase de arácnidos, aunque durante mucho tiempo fueron considerados un orden. Existen casi 50.000 especies descritas, y se estima que existen entre 100.000 y 500.000 especies que todavía no han sido halladas.

La mayoría de los ácaros son diminutos y alcanzan unos pocos milímetros de longitud; el ácaro de los folículos humanos mide solo 0,1 mm (menor que algunos protozoarios) y los ácaros del polvo doméstico miden entre 0,2 y 0,5 mm; ambos son, pues, microscópicos; en el otro extremo, los ácaros de terciopelo alcanzan longitudes de 10 mm. Los ácaros son uno de los grupos más antiguos de animales terrestres; se conocen fósiles suyos del Devónico Inferior, hace unos 400 millones de años.

Los ácaros forman parte del grupo más antiguo, diverso y numeroso de animales que ha existido desde que apareció la vida en el planeta, el de los artrópodos. Conviene por lo mismo señalar algunas de las más importantes características de estos animales, antes de entrar al tema concreto de los ácaros.

Los artrópodos, cuyo nombre significa «patas articuladas», aparecieron en los mares del Cámbrico hace más de 500 millones de años y desde entonces han sido el grupo dominante sobre la Tierra, en cuanto al número de especies se refiere. Fueron también los primeros animales que pasaron del ambiente acuático al terrestre, incursionaron tierra adentro y se adaptaron a todos los hábitats de este medio. Es imposible precisar el número de especies y mucho menos el número de individuos que han poblado y continúan poblando las aguas, el aire y el suelo, pero se calcula que son alrededor de 10 millones de especies, gran parte de las cuales aún no han sido descritas. De cualquier manera, su número es muy superior al de todos los demás seres vivos juntos.

Los primeros artrópodos de los que se tiene noticia fueron los trilobites, extinguidos hace mucho. Por los restos fósiles que se han conservado y que son testimonio de su existencia, se sabe que durante 300 millones de años se propagaron en las aguas de los océanos, y desaparecieron durante el periodo Pérmico; sin embargo, durante todo este tiempo fueron evolucionando en otras formas, dando así origen a todas las demás ramas de artrópodos que actualmente se conocen y que se encuentran distribuidas en el mundo entero, adaptados a todos los hábitats accesibles a la vida y asociados a todos los demás seres vivos. Son especialmente importantes por su directa participación en la vida del hombre y sus actividades diarias, sea en sus aspectos económico, nutricional, agrícola, médico o veterinario.

El conjunto de todos ellos constituyen el phylum Arthropoda, que se divide en tres grandes subphyla: el de los Trilobitomorpha, que comprende a todas las formas fósiles de trilobites; el de los Chelicerata, provistos de quelíceros y pedipalpos (sin antenas ni mandíbulas), donde se agrupa a las cacerolitas, los arácnidos, los ácaros y las arañas de mar y c) el de los Mandibulata, con antenas y mandíbulas (sin quelíceros ni pedipalpos), que incluye a los crustáceos, los miriápodos y los insectos.

Los ácaros de almacenamiento, o ácaros menores, son una amplia gama de familias, géneros y especies que se encuentran principalmente en alimentos almacenados, cereales, harinas, granjas, graneros y heno. La exposición a estos ácaros, y a sus alérgenos, también puede darse en las viviendas, en especial en aquellas con problemas de humedad. Se han identificado numerosas especies de estos ácaros menores en el polvo de casa, y, por ello, se usa el término ácaros domésticos para todas las especies de ácaros que se pueden encontrar en el medio ambiente doméstico y para las cuales se hayan descrito procesos de sensibilización mediada por IgE.

El polvo de casa es la principal fuente de alérgenos del interior de las viviendas, y es un ecosistema complejo compuesto por una mezcla de materia inorgánica y orgánica, que incluye escamas de piel humana, fibras, esporas de hongos, bacterias, virus, pólenes, insectos, derivados dérmicos de animales, restos de alimentos, plantas de interior y ácaros. El material inorgánico que contiene el polvo no produce sensibilización alérgica, mientras que el componente orgánico existente puede actuar como irritante o como alérgeno. Cualquier proteína presente en el polvo se puede comportar como alérgeno si es capaz de estar suspendida en el aire, ser inhalada y llegar hasta las vías respiratorias induciendo una respuesta alérgica mediada por IgE. Es importante saber que la susceptibilidad para padecer enfermedades alérgicas respiratorias depende de la predisposición genética y de la exposición en condiciones adecuadas, es decir, en cantidad y tiempo suficiente, a determinadas sustancias que se comportan como alérgenos.

Algunos ácaros tienen importancia económica al ser parásitos de plantas, de animales (como las garrapatas de las abejas melíferas del género Varroa) y del ser humano (como el ácaro arador de la sarna), o el ácaro del polvo (Dermatophagoides farinae) causante de alergias.

Los excrementos de los ácaros y los ácaros muertos son los factores desencadenantes más comunes de la alergia perenne y de los síntomas del asma; se dispersan en un polvo fino que es inhalado por los habitantes del recinto donde se encuentran. Los ácaros del polvo, que son los que se hallan en los entornos domésticos, se encuentran por toda la casa. En las habitaciones los ácaros se alimentan de escamas de piel humana o animal.

Los síntomas de la alergia a los ácaros del polvo pueden incluir congestión o goteo de la nariz con estornudos (particularmente en la mañana), picazón y lagrimeo de los ojos, tos, silbido al respirar y enrojecimiento de la piel.

Los acaricidas son sustancias químicas no tóxicas para los seres humanos, con capacidad de eliminar los ácaros y evitar las enfermedades que causan. Hay varios productos de este tipo en el mercado para el tratamiento de colchones, alfombras, sofás, ropa de cama… son sustancias como el benzoato de benzilo y el ácido tánico.

La sensibilización a alérgenos presentes en el interior de las viviendas es más importante para el desarrollo de asma que la sensibilización a alérgenos de exterior. Aunque se puede ser alérgico a una o más de las sustancias orgánicas presentes en el polvo, son los ácaros domésticos la fuente principal de alérgenos del polvo de casa, produciendo potentes alérgenos capaces de sensibilizar e inducir síntomas respiratorios en las personas sensibilizadas.

¿Qué ácaros son relevantes para producir alergia?

Se calcula que sólo 25 de las más de 40.000 especies de ácaros descritas, están relacionadas con enfermedades alérgicas en el ser humano. Los ácaros implicados con más frecuencia en procesos alérgicos pertenecen al orden Astigmata, en el cual únicamente tres superfamilias son las responsables de causar problemas alérgicos:

  • Pyroglyphoidae: a esta familia pertenecen el Dermatophagoides (D.) pteronyssinus, D. farinae y Euroglyphus maynei, que son sin lugar a dudas los inductores de la inmensa mayoría de sensibilizaciones alérgicas en Europa y Estados Unidos.
  • Acaroidae: Acarus siro y Tyrophagus putrescentiae son las especies responsables dentro de esta familia.
  • Glycyphagodae: Blomia tropicalis y Lepidoglyphus destructor se reconocen cada vez con más frecuencia como responsables de cuadros alérgicos.

Estos ácaros son inofensivos para el hombre y son sus residuos fecales los que poseen un gran poder alergénico. Su ciclo de crecimiento (de huevo a adulto) es de 25 días a 25º C, y la mayoría de ellos viven entre dos y tres meses, a lo largo de los cuales realizan una o dos puestas de huevos que suelen contener entre 20 y 40 unidades.

¿Cuál es el hábitat de los ácaros?

Los ácaros causantes de enfermedad alérgica se localizan preferentemente en dos diferentes hábitats: viviendas y almacenes.

Los principales factores ambientales que influyen en la presencia de ácaros son: la temperatura y la humedad relativa. La temperatura óptima oscila entre 25º y 35º C.

La humedad relativa óptima para el D. pteronyssinus es superior al 75% y para el D. farinae (véase imagen) oscila entre el 50 y el 60%. La proliferación en estas condiciones es más rápida que a temperatura y humedad inferiores. La presencia de hongos facilita también el desarrollo de los ácaros, probablemente por la digestión previa que realizan estos sobre los lípidos con los que a su vez se alimentan.

Las especies que invaden las viviendas se denominan ácaros domésticos o del polvo de la casa, y pertenecen mayoritariamente a la familia Pyroglyphidae. Conviven con el hombre ya que se alimentan de las descamaciones dérmicas que éste pierde (en torno a 1 gramo al día) o de la de los animales de compañía. Su hábitat principal es el interior de las viviendas, encontrándose en mayor número en los colchones, sofás y en muebles revestidos de tela. En España se aíslan preferentemente D. pteronyssinus y D. farinae.

Las especies que se encuentran en almacenes se denominan ácaros de depósito o de almacenamiento. En España se destacan por su presencia los siguientes: Acaro siro, Tyrophagus putrescentiae (véase imagen izda. de la página siguiente) y Lepidoglyphus destructor. Se alimentan principalmente de granos y de otras partículas de comida presentes en el polvo doméstico, y su hábitat principal son los granos y en general los alimentos almacenados. Sin embargo, en ciertas circunstancias favorables, pueden proliferar en gran número en el interior de las viviendas. En las zonas donde se almacenan alimentos ricos en proteínas, como jamón o queso, se encuentra, sobre todo, el Tyrophagus putrescentiae. A su vez el Lepidoglyphus destructor (véase imagen dcha.) se aísla fácilmente en almacenes de cereales y es, además, un género muy común en el norte de España, en especial, en Galicia. El ácaro de depósito más frecuente en los domicilios de zonas tropicales y en las islas Canarias es la Blomia tropicalis.

¿En qué zonas de las casas abundan los ácaros?

Dentro de las casas los ácaros se han aislado en las sábanas, almohadas, alfombras, cortinas, muebles blandos, peluches y colchones. Los sofás y sobre todo los colchones constituyen un excelente microhábitat para la fauna acarina ya que, dada la profundidad de su relleno, retienen mucha humedad, proporcionándoles los tres factores que necesitan para su óptimo desarrollo: calor (procedente de la transpiración del que duerme) y comida (escamas de piel humana). La humedad es el principal factor limitante para su desarrollo; los niveles óptimos de humedad relativa son del 75% a 15º C. Estos valores se alcanzan fácilmente en los colchones mientras están ocupados, un promedio de ocho horas al día. El calor y la transpiración de sus ocupantes producen un aumento en su temperatura que alcanza

25º-30º C, y su humedad relativa se incrementa en un 5-8%.

De ese modo, durante esas 8 horas al día, los ácaros de los colchones encuentran unas condiciones favorables de desarrollo. Este tiempo puede ser mayor si la cama se hace de modo inmediato, sin ventilación previa, por lo que se puede mantener cierto grado de temperatura y humedad durante casi 16 horas.

En los domicilios de zonas con climas templados, el número de ácaros varía según las estaciones, con cifras bajas al comienzo del verano y una elevación progresiva a medida que se aproxima el otoño y un posterior descenso en otoño-invierno. En los meses de verano, al no utilizarse calefacción y ventilarse más el domicilio, aumenta la humedad relativa del aire. En cambio, durante el invierno, las puertas y ventanas se abren menos y, junto al empleo de calefacciones, se crea un clima caliente, pero muy seco, en el interior, nada favorable para su crecimiento. En los dormitorios, sin embargo, el uso diario de los colchones les permite sobrevivir en mejores condiciones que en las alfombras.

A pesar del descenso del número de ácaros vivos en los meses de invierno, las partículas alergénicas producidas por ellos permanecen en el ambiente y descienden de modo más gradual. Así, aunque el número de ácaros muestre fluctuaciones durante el año, los síntomas causados por sus alérgenos suelen ser perennes.

¿Cuál es la causa de la alergia a los ácaros?

Las partículas fecales producidas por los ácaros son la principal fuente de alérgenos. Cada ácaro puede producir diariamente unas 20 partículas fecales con capacidad de ocasionar síntomas alérgicos, incluso tras la muerte del ácaro. En los últimos años se ha avanzado extraordinariamente en el estudio de las características de los alérgenos de los ácaros y se han identificado más de veinte grupos moleculares diferentes, muchos de ellos proteínas extracelulares con actividad enzimática.

En estudios recientes se ha comprobado que para producir asma, los niveles críticos de ácaros del polvo doméstico se encuentran entre 100 y 500 ácaros por gramo de polvo o, lo que es lo mismo, una tasa de Der p1 (alérgeno mayor del D. pteronyssinus) igual o mayor a 2 micras por gramo de polvo doméstico.

Los alérgenos procedentes de los ácaros sólo se pueden detectar en el aire durante las actividades que producen turbulencia, tales como pasar el aspirador o sacudir la ropa de la cama. Cada ácaro puede poner de 20 a 50 huevos, y producir una nueva generación, aproximadamente, cada 21 días. De este modo los ácaros, vivos y muertos, se pueden encontrar por centenares en cada gramo de polvo doméstico, en especial en el colchón, la almohada y la ropa de cama. Este hecho puede explicar que la mayoría de los pacientes alérgicos a los ácaros no relacionen la exposición al polvo con las agudizaciones de sus síntomas respiratorios. Y es que realmente los ácaros actúan más como fuente crónica y acumulativa de alérgenos que causan inflamación-hiperreactividad bronquial, que como desencadenantes de crisis agudas de rinitis o asma.

¿Cómo se manifiesta la alergia a los ácaros?

Los síntomas de la alergia a los ácaros son, en la mayoría de casos, de tipo respiratorio: rinitis y asma. En algunas regiones de nuestro país la sensibilización a los ácaros afecta a más del 30% de la población y al 90% de los asmáticos.

En el caso de la rinitis el paciente sufre episodios, ­preferentemente matutinos al levantarse de la cama, de estornudos en salva (más de 10 estornudos consecutivos), picor nasal, hidrorrea copiosa (goteo nasal) y congestión nasal intensa. Estos síntomas suelen ceder

al abandonar el domicilio para reaparecer por la noche al

acostarse, o cuando manipula grandes cantidades de polvo. Aproximadamente un 30% de estos pacientes puede presentar también síntomas de asma que se manifiestan en forma de accesos de tos, opresión torácica, sibilancias e intolerancia al ejercicio físico o a la risa. Los síntomas suelen ser perennes, es decir, se producen durante todo el año, aunque pueden experimentar exacerbaciones en primavera y en otoño. Los síntomas oculares son más raros que en la alergia al polen. También se ha sugerido que los ácaros pueden desempeñar un papel importante en la patogenia y en las exacerbaciones de la dermatitis atópica. Por último, los ácaros son capaces también de contaminar determinados alimentos elaborados con harinas enriquecidas utilizadas para rebozados o repostería y producir cuadros de anafilaxia (la manifestación más grave de la alergia).

¿Cómo se diagnostica la alergia a los ácaros?

Como en cualquier otro proceso alérgico, el interrogatorio médico es fundamental y con frecuencia suficientemente orientativo. La exploración física ha de incluir la observación de la mucosa nasal mediante rinoscopia anterior, la auscultación respiratoria y la observación de la piel. Para establecer un diagnóstico de certeza, el especialista en Alergología debe realizar las pruebas alérgicas prick-test con una selección de alérgenos que varían de unas regiones a otras. Son pruebas sencillas, rápidas y muy fiables, cuando se realizan por personal experimentado. En algunos casos, además, será necesario efectuar determinaciones de IgE específica en sangre y, más raramente, estudios de exposición controlada al alérgeno, ya sea a nivel nasal, ocular o bronquial.

¿Se puede prevenir la alergia a los ácaros?

Los ácaros son habitantes naturales de nuestro entorno doméstico y su presencia no significa una falta de limpieza del hogar.No está claro siel control ambiental puede prevenir la alergia a los ácaros, y la evidencia existente sugiere que la prevención primaria no es posible. Los estudios demuestran que la aplicación de medidas de control ambiental sí puede ser beneficiosa sobre la aparición y la gravedad del asma, y en cambio no parece que sea muy útil en cuanto a prevenir o retrasar la aparición de la sensibilización a los ácaros, sobre todo en zonas donde existe una gran exposición a sus alérgenos (por ejemplo en las islas Canarias o en Galicia).

¿Qué medidas de control ambiental son eficaces?

Para que las medidas de control ambiental sean efectivas, antes de su aplicación es necesario conocer el medio ambiente del paciente, incluido su grado de exposición, de sensibilización y la gravedad de su enfermedad alérgica. Se ha demostrado que cuanto más intensa es la sensibilización del paciente a los ácaros, más se va a beneficiar con estas medidas de control ambiental, si bien, para que sean efectivas, su aplicación ha de ser muy estricta.

  • Medidas muy eficaces: Eliminar del dormitorio las alfombras y todos los objetos que acumulen polvo; utilizar fundas antiácaros en el colchón y la almohada (el colchón y la almohada deben aspirarse durante 10 minutos una vez al mes y exponerlos al sol durante 30 minutos 2 o 3 veces al año); lavar con agua caliente (a más de 50º C) al menos una vez a la semana las sábanas y las mantas; realizar una limpieza periódica de sofás, moquetas y otras zonas de la casa; revisar periódicamente el domicilio y reparar los problemas de humedad que se detecten; reducir la humedad relativa en toda la casa, o al menos en el dormitorio, por debajo del 50% (el uso regular de deshumidificador consigue reducir la población acarina de manera significativa).
  • Medidas de eficacia intermedia: uso de filtros de aire para retener alérgenos de ácaros, utilización de acaricidas y de aire acondicionado.

¿Qué tratamientos son útiles en la alergia a los ácaros?

Además de las medidas de evitación de los ácaros mencionadas más arriba, en la actualidad se dispone de un buen número de medicamentos que alivian y controlan los molestos síntomas que provoca este tipo de alergia. Asimismo, en pacientes correctamente diagnosticados, y en función de la evolución de sus síntomas alérgicos, el alergólogo puede prescribir, además, un tratamiento con vacunas hiposensibilizantes de ácaros con objeto de tratar de forma integral su afección de base.

Objetivo

Elaborar una formula Anti-Ácaros  para el uso diario en prendas y muebles.

Justificación

Se cree comúnmente que al trapear, barrer y aromatizar el ambiente del hogar este queda totalmente higiénico, es fácil confundir a simple vista que este sea verdad, pero lo cierto es que los microbios, bacterias, y en este caso, los ácaros, se reproducen diariamente decidido a la poca importancia que le damos, es por eso que nuestro proyecto se enfocara precisamente en facilitar ese trabajo con un método muy sencillo y una herramienta casera, una formula anti ácaros que eliminara permanentemente a estos arácnidos y evitara enfermedades respiratorias.

Existen varios mitos que la gente cree por razones sin sentido, que los ácaros pueden aumentar considerablemente el peso de colchones y almohadas debido a su materia fecal. Si bien es cierto que incrementa con el tiempo, no está comprobado científicamente.

Hipótesis

Si lograríamos esta formula Anti-Ácaros los eliminaríamos  su expancion

Método (materiales y procedimiento)

-1/2 taza de alcohol
-1/2 taza de agua
-1 rociador
-1 embudo
-banda de pino
Procedimiento:
1.- Vaciar la taza de alcohol junto con el agua en el rociador y déjalo reposar 5 minutos
2.- Agrega 30 gotas de pino y agita
3.- Déjalo en refrigerador 10 minutos y listo

Galería Método

Resultados

En las distintas fuentes de información los ácaros han producido esencias fecales en loas cuales hay varias enfermedades como el pulmón negro que puede llevar asta la muerte, las investigaciones dicen que el alcohol con otros químicos y sustancias han tenido como resultado eliminar este arácnido

Galería Resultados

Discusión

Nos dimos cuenta que hay formulas caseras y económicas para eliminar los ácaros con los materiales que se necesitan con esto notamos que tanto la investigación y el trabajo nos dan base parta asegurar la salud el mantenimiento de nuestro hogar

Conclusiones

Como es bien sabido los ácaros son dañinos, nos dimos cuenta de que hay mucha importancia en combatirlos por las diferentes enfermedades que llegan a producir como el asma, dermatitis atópica, etc., según nuestra investigación hay tanto materiales caseros, como productos que se pueden adquirir que ayudan a eliminarlos y prevenirlos

Bibliografía

http://www.alergiafbbva.es/los-responsables-de-la-rinoconjuntivitis-y-el-asma-alergicas/8-alergia-al-polvo-%C2%BFque-son-los-acaros-y-como-evitarlos/

http://es.wikipedia.org/wiki/Acari

www.alergiafbbva.es/…/8-alergia-al-polvo-¿que-son-los-acaros-y-como-…

 



Formula Anti-Ácaros

Summary

Research Question

Investigation question: How elaborate a production that eliminate the mite in clothes, furniture, etc.?

Problem approach

Background

Objective

Elaborate a formulate anti-mite for the diary use in clothes, furniture, etc.

Justification

Hypothesis

If we elaborate this formulate anti-mite, we will eliminate and prevent its expansion.

Method (materials and procedure)

Results

Discussion

Conclusions

Bibliography