Medicina y Salud

Por qué debo cuidar mi corazón

  • Categoría: Pandilla Kids (3ro., 4to., 5to. y 6to. Año de primaria)
  • Área de participación: Medicina y Salud
  • Asesor: ANA DELIA GONZALEZ ORTIZ
  • Autor: Proyecto1021 Invitado ()

Resumen

El corazón es la máquina más perfecta del cuerpo humano. Tiene el tamaño aproximado de un puño, es hueco y tiene forma de pera. Este musculo cardíaco, situado en medio del tórax, funciona como una bomba. Recoge la sangre del organismo, pobre en oxígeno y la bombea hacia los pulmones, donde se oxigena y libera los desechos metabólicos (dióxido  de carbono).Esta sangre rica en oxígeno será distribuida desde el corazón hacia todos los órganos del organismo.

El corazón de la mujer suele ser más pequeño que el del hombre, por lo que late de 5 a 8 veces más por minuto.

Nuestro corazón está relacionado con todas nuestras células- citoplasma- membrana plasmática- núcleo- nucelolo  el túnel nucelar , con la luz (ADNA) de cada célula, y los órganos, con nuestros tejidos, con nuestros  aparatos , con nuestros órganos, con nuestros sistemas, y nuestra masa encefálica cerebro reptiliano. Límbico y cerebro humano en si con  todo nuestro SER. Todos estos elementos sin el corazón están muertos, serán inertes.

 

En la actualidad, en México y en el mundo, las enfermedades relacionadas con el corazón se ubican en la primera posición de causa de muerte (INEGI, 2012). Dentro de estas enfermedades se encuentran la hipertensión arterial sistémica o presión alta, accidentes cerebrovasculares (conocidas como embolia), infartos y otros daños de las arterias que irrigan el corazón; debido a nuestros malos hábitos.

Ahora bien, necesitamos hablar con nuestro corazón, darle caricias y masajes, para que actúe bien, fisiológicamente, con su frecuencia cardiaca, una excelente irrigación sanguínea, un buen latido sistólico y diastólico y así toda estará bien, hasta el final de nuestros días.

Pregunta de Investigación

Por qué debo cuidar mi corazón?

Planteamiento del Problema

Uno de los principales problemas de salud en México se debe a que la persona no acude a un médico hasta que la enfermedad está en etapas más desarrolladas con síntomas muy agudos.   La mayoría de las enfermedades cardiovasculares pueden prevenirse con la disminución de los factores de riesgo, como el consumo de tabaco, una buena dieta alimenticia para prevenir la obesidad, tener una buena actividad física, etc…..

Lo que Bio-Solutions IMD busca es popularizar, facilitar y hacer accesible  la realización de un análisis de los sonidos del corazón (sístole y diástole), donde se aplican diferentes algoritmos a las ondas sonoras y mediante redes neuronales artificiales,  para otorgar a la población una rápida alerta de riesgo en caso de corresponder con algún soplo en el corazón y así promover acudir al médico, también ayuda al médico en el diagnóstico del paciente. Se busca también su uso hacia niños menores a 10 años para detectar cualquier posible cardiopatía congénita.

Lo que se busca con este dispositivo es la rápida detección de anomalías por medio de un algoritmo (Algoritmo Wavelet) el cual analiza los sonidos acústicos obtenidos del corazón y genera un pre-diagnóstico del paciente en caso de detectar algún padecimiento relacionado con alguna obstrucción o soplo.

Se busca que sea de bajo costo, portable, genérico e inteligente con el fin de proveer este dispositivo a clínicas o a cualquier público, sobre todo las zonas donde no se cuente con especialistas relacionados con enfermedades del corazón (Poblaciones de bajos recursos). Un diseño versátil que le permita al usuario obtener los datos siguiendo sencillas instrucciones, fomentando el diagnóstico temprano y la debida atención de las patologías cardíacas. Los sonidos recolectados se pueden adquirir mediante cualquier computadora o inclusive vía telefónica entrando así en la rama de la tele medicina.

. Es por eso el interés en difundir su funcionamiento y del  cómo cuidar y prevenir enfermedades del corazón.

Antecedentes

William Harvey (1 de abril de 15783 de junio de 1657) fue un médico inglés a quien se le atribuye describir correctamente, por primera vez, la circulación y las propiedades de la sangre al ser distribuida por todo el cuerpo a través del bombeo del corazón.[1][2]​ Este descubrimiento confirmó las ideas de René Descartes, que en su libro Descripción del cuerpo humano había dicho que las arterias y las venas eran tubos que transportan nutrientes alrededor del cuerpo.

Harvey nació en Folkestone, Kent, Inglaterra el 1 de abril de 1578, y fue hijo de Thomas Harvey, un próspero comerciante. En primer lugar estudió en The King’s School de Canterbury, una prestigiosa grammar school. A los quince años ingresó en el Gonville and Caius College de Cambridge, institución de atmósfera italianizante debido a la formación en Padua de su director, John Caius, quien incorporó al college las directrices de la educación paduana. En 1597 recibe su grado de Bachelor of Arts y parte rumbo a Italia para ingresar un año más tarde a la Universidad de Padua, donde estudió con el maestro Hyeronimus Fabricius, graduándose como médico en 1602. De regreso a Inglaterra, revalidó su título italiano en la Universidad de Cambridge. En 1604 se casó con Elizabeth Browne sin tener descendencia.

Es probable que para sus descubrimientos acerca de la circulación de la sangre Harvey se haya inspirado en las obras de René Descartes y Miguel Servet o en la medicina musulmana antigua, especialmente en la obra de Ibn Nafis, quien realizó trabajos sobre las arterias en el siglo XIII. Sin perjuicio de ello, lo cierto es que la principal influencia para el desarrollo de sus avances fueron los autores y profesores de la Escuela de Padua: Hyeronimus Mercurialis (1530-1606), traductor de Hipócrates; Mateo Realdo Colombo (1516-1559), Gabriel Falopio (1523-1562), Andreas Vesalio (1514-1574), creador de la anatomía moderna, y principalmente su maestro directo, Hyeronimus Fabricius (1533-1619), quien había descubierto ciertos pliegues membranosos en el interior de la venas, a los que llamó “válvulas”, y que describió en su libro De venarum ostiolis (Sobre las válvulas venosas, 1603). Fabricius introdujo a Harvey en la fisiología desde la visión moderna del movimiento desarrollado en Padua durante el siglo XVI, así como a la investigación embriológica y del desarrollo del feto, temas también abordados en la obra de Harvey.

Aparte de su experiencia en Padua, influyó en Harvey para el posterior desarrollo de sus ideas su labor en el Colegio de Médicos de Londres, donde se le encomendó hacerse cargo de las Lumleian Lectures, desde 1616 hasta 1656. Dos lecciones semanales durante el año y una disección o anatomía pública al año eran las tareas a desempeñar. En 1616 escribe sus Praelectiones Anatomicae (Lecciones previas de anatomía), con las que preparaba sus clases.

Harvey desarrollo sus estudios sobre la circulación de la sangre en 1616, publicando sus resultados en 1628, en su libro Exercitatio Anatomica de Motu Cordis et Sanguinis in Animalibus (Un estudio anatómico sobre los movimientos del corazón y la sangre de los animales), donde utilizando el método científico argumentó su hipótesis de que la sangre era bombeada alrededor del cuerpo por el corazón en el sistema circulatorio. Esta hipótesis se basaba en la observación (observaciones anatómicas) y experimentación (vivisección).

El descubrimiento de Harvey destruyó el antiguo modelo de Claudio Galeno que identificaba la sangre venosa ( de color rojo oscuro) y la arterial (más fluida y brillante), cada una con una función diferente. La sangre venosa era producida en el hígado y la arterial en el corazón. Estas sangres se dispersaban por el cuerpo y eran consumidas por él. Harvey determinó que el hígado necesitaría producir 540 libras (unos 250 litros) de sangre por hora para que el cuerpo funcionara; algo exagerado, por lo que concluyó que la sangre se va reciclando.

Los cambios fundamentales en la mentalidad del país como consecuencia de la Revolución Mexicana de 1910, se reflejaron en su vida médica, su Universidad y sus Hospitales. El año de 1924 puede situarse como el inicial de una reforma médica, que partió del Hospital General de la Ciudad de México en donde se comienza a desmembrar la medicina general para dar paso a las especialidades. Así, el primer departamento de especialidad médica en nacer fue el de Cardiología, que tuvo su primer servicio en 1924, y fue confiado al Dr. Ignacio Chávez Sánchez durante un lapso de 20 años, hasta 1944 en que se inaugura el Instituto Nacional de Cardiología.

Después de dos años de estudio en París, bajo la dirección de los profesores Henri Vaquez y Charles Laubry, el profesor Ignacio Chávez regresa a México en 1927 con la firme idea de crear un Instituto que según sus palabras, “fuera algo más que un hospital para cardíacos”. Lo concebía como un lugar en donde se impartiera asistencia médica no sólo de alta calidad científica sino además con calor humano dirigida a una población económicamente débil y necesitada, en años en los que la Seguridad Social en México aún no se iniciaba. Aunado a esto, se pretendía que dicho Instituto contara con una escuela que fuera un foco de difusión de doctrinas médicas avanzadas. Finalmente, otro de los objetivos era el fomentar la investigación científica, aquélla que creara ciencia propia y no se concretara a importar y asimilar la extranjera. En otras palabras “a vivir a tono con el pensamiento científico de hoy, no con el de ayer; y en el concierto universal de las ideas, ser una voz y no un eco”.

Surgimiento (1944)

Así, el 18 de abril de 1944 es inaugurado en la Calzada de la Piedad (hoy llamada Av. Cuauhtémoc), el Instituto Nacional de Cardiología, por el entonces Presidente de la República Manuel Avila Camacho y el Secretario de Salubridad y Asistencia, el Dr. Gustavo Baz, en una solemne ceremonia que reunió a la comunidad científica de todo el continente.

El Instituto nace en plena madurez y cabal productividad, “fatalmente a tiempo” (el mundo, y en particular Europa, emergía apenas de la II Guerra Mundial), lo que permitió un gran caudal de aportaciones científicas desde sus primeros momentos. Los distintos campos de trabajo del Instituto y de sus hombres se delineaban ya con nitidez, creciendo y floreciendo en la década de los años ‘50s. La clínica clásica, apoyada en la moderna tecnología de esos años, se depura, y difunde a través de un amplio grupo de maestros en donde destacan los nombres de Ignacio Chávez, Teófilo Ortiz Ramírez, Manuel Vaquero, Salvador Aceves, Rafael Carral y de Teresa, Felipe Mendoza, Armando Cuéllar, Alfonso de Gortari, Luis Méndez y José Manuel Rivero Carvallo, entre otros.

Florece el Cateterismo Intracardíaco y con él los estudios pioneros Hemodinámicos y Electrofisiológicos, realizados por los doctores Rodolfo Limón, Víctor Rubio y Jorge Soní, apoyados por decenas de brillantes colaboradores mexicanos y extranjeros. Es en este departamento del Instituto, en donde por primera vez a nivel internacional se pasa el catéter a través de un canal arteria persistente y se realizan valvuloplastías, olvidadas en ese momento y tan de actualidad en el presente decenio. Utilizando la Técnica de Celis, que modifica el método original de Agustín Castellanos, se inyecta una substancia opaca directamente en el sitio que se desea explorar dentro del corazón obtiendo nítidas imágenes que son publicadas en 1946 por Ignacio Chávez, Narno Dorbecker y el doctor Celis. En 1947 los suecos perfeccionan este método y lo llaman Angiocardiografía Selectiva, misma que hoy se práctica en todo el mundo. En Electrocardiografía, Demetrio Sodi Pallares, Enrique Cabrera y decenas de colaboradores mexicanos y extranjeros dieron renombre internacional a la Escuela de Electrocardiografía desarrollada en este Instituto. Años después, el Instituto se incorpora a la Cirugía Cardiovascular, con la figura de Clemente Robles y en el campo de la Fonomecanocardiografía, aparece con brillantez Bernardo Fishieder.

En el campo de la Anatomía Patológica destaca Isaac Costero quien da forma a toda una escuela en esta rama, mientras que en la Fisiología, Arturo Rosenblueth con un selecto grupo de colaboradores realiza una gran labor aportando numerosos estudios. Más tarde, Norbert Wiener, publica con Rosenblueth en el Instituto su libro de Cibernética. En la Farmacología, Rafael Méndez hace escuela por décadas gracias a su duradera labor de investigación. También aparece el manejo de una rica Cardiología Pediátrica iniciada por Jorge Soberón y tomada en rápido liderazgo de años por Jorge Espino Vela a partir de 1950, en donde destacan las aportaciones embriológicas de María Victoria de la Cruz y diversos colaboradores. La Nefrología moderna se instala con Herman Villarreal y la Reumatología con Javier Robles Gil. En la década de los años ‘50s, los doctores Chávez, Robles Gil, Salvador Aceves y Felipe Mendoza presentan en el ler. Simposio Internacional de Fiebre Reumática, un programa de prevención que es puesto en práctica en el Instituto y después a nivel nacional con magníficos resultados por años. Finalmente, es destacable la valiosa labor de asistencia iniciada desde entonces por las enfermeras religiosas de la Congregación del Verbo Encarnado, quienes han brindado en todo momento los cuidados y atenciones necesarias para el restablecimiento de los enfermos.

Al iniciarse la década de los años ‘60s el Maestro Chávez abandona la dirección del Instituto al ser electo Rector de la Universidad Nacional Autónoma de México. Le siguen en la dirección, con una muy distinguida labor los Maestros Salvador Aceves (1961-1965), Manuel Vaquero (1965-1971) y Jorge Espino Vela (1971-1975).

 

 

EL NUEVO INSTITUTO NACIONAL DE CARDIOLOGÍA (1976)

Desde 1967, durante la gestión del Dr. Vaquero, surge la idea de renovar estructuralmente con más edificios y recursos el primitivo Instituto; quedando a cargo del maestro Ignacio Chávez, el Comité Asesor encargado de la planeación y desarrollo de las nuevas instalaciones. En 1969 durante la ceremonia del 25 aniversario del Instituto, ante el Presidente de la República, Chávez anuncia los planes y campaña de renovación, siendo sin embargo hasta el año siguiente, cuando se toma la decisión de iniciar la construcción del nuevo Instituto.

En 1971 bajo la dirección del Dr. Jorge Espino y con el apoyo de la Comisión de Planeación, se logran importantes avances en la gestación del nuevo Instituto: el Gobierno Federal cede el terreno necesario (62,000 mts2) en el área de Tlalpan; se obtiene una importante cantidad de la venta del anterior edificio y la Fundación Mary Street Jenkins, institución mexicana presidida por don Manuel Espinosa Yglesias, contribuye generosamente con más de la tercera parte del costo total. Frente a esta noble reacción pública, el Gobierno decide aportar una importante cifra para poder así terminar la obra y además renovar el equipo médico.

Gracias a todos estos esfuerzos se logra finalmente iniciar la construcción de las nuevas instalaciones. El 13 de marzo de 1976 el Dr. Chávez, acompañado por el Presidente de la República Luis Echeverría, coloca la primera piedra del proyecto, arrancando los trabajos que finalizarán en un tiempo récord de tres años; el 17 de octubre de 1976, es inaugurado oficialmente el nuevo Instituto Nacional de Cardiología.

 

El Maestro Chávez permanece en la Dirección del Instituto por dos años y medio, hasta asegurarse de su cabal funcionamiento. Abandona la Dirección en buen estado de salud en abril de 1979, a los 82 años de edad, siendo substituido por el Dr. Jorge Soní. Lamentablemente, más tarde en ese mismo año el Maestro Chávez fallece. A partir de entonces, como reconocimiento a su gran obra y por decisión unánime el Instituto Nacional de cardiología lleva su nombre.

 

Debido a su valiosa labor, el Dr. Soní es reelecto a un segundo periodo hasta abril de 1989, año en que entra a la dirección el Dr. Ignacio Chávez Rivera también electo por dos periodos (1989-1999).

 

Finalmente, hoy día el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez” es dirigido por el Doctor Marco Antonio Martínez Ríos, quién continúa con la labor de asistencia, enseñanza e investigación que han dado renombre internacional a este Instituto.

El Instituto Nacional de Cardiología como Centro Internacional de Formación Cardiológica

A lo largo de sus más de 50 años de vida el Instituto ha contribuido no sólo al fomento de las relaciones amistosas y de colaboración científica entre los cardiólogos de todo el mundo. Su labor de enseñanza en la formación de cardiólogos provenientes de todo el mundo, particularmente de América y algunos países Europeos ha sido permanente y de tradición trascendente. Cerca de 2,500 jóvenes médicos de 60 países, distribuidos en cada continente, han hecho residencias y estancias de estudio en el Instituto. Dos mil de ellos, han hecho entrenamiento de al menos dos años y han obtenido la especialización. Algo más de 900 han sido de México, 750 de Centro y Sudamérica, 250 de Europa y el resto de lugares de Asia, África y Oceanía.

Fundación de la Sociedad Interamericana de Cardiología

En 1944, durante la inauguración del Instituto Nacional de Cardiología, se dieron cita en México distinguidos cardiólogos provenientes exclusivamente del continente Americano (debido a la existencia de la II Guerra Mundial); siendo especialmente significativa la delegación estadounidense con la participación de ilustres nombres en el campo de la cardiología tales como: Frank N. Wilson, Paul D. White, Samuel Levine, Haroid Pardee, Louis N. Katz, Carl J. Wiggers, Ch. Wolferth, Paul Ducket Jones y G. Hermann entre otros. El éxito de esta reunión científica fue tal que se acordó considerarla como el 1er. Congreso Interamericano de Cardiología, fundando además la Sociedad Interamericana de Cardiología misma que fue convocada a reunirse dos años después en 1946 nuevamente en México, constituyendo el II Congreso Interamericano. Los dos primeros tuvieron lugar así en nuestro país, bajo la presidencia del doctor Ignacio Chávez, relizándose el tercero en Chicago en 1948, bajo la dirección de Louis N. Katz, llevándose a cabo a partir de entonces de manera exitosa en distintas regiones de América, en forma bianual bajo el mando de 13 Presidentes.

 

Fundación de la Sociedad Internacional de Cardiología

En 1946, durante la realización del II Congreso Interamericano en México, contando ya con la participación de ilustres profesores europeos, varias delegaciones hicieron la propuesta de crear una asociación que agrupara médicos cardiólogos de todos los continentes. Aprobada la propuesta, es fundada oficialmente en este congreso la Sociedad Internacional de Cardiología. En su acta constitutiva, firmada por destacados cardiólogos de Argentina, Bélgica, Brasil, Cuba, Checoslovaquia, Dinamarca, Estados Unidos, Francia, Holanda, Italia, Suecia y Suiza; se acordó designar al profesor Charles Laubry como Presidente de la Sociedad y al Dr. Chávez, como el encargado de redactar los estatutos y de convocar al I Congreso Mundial de Cardiología.

Así, en septiembre de 1950, fue inaugurado en el gran anfiteatro de la Sorbonne de París, el I Congreso Mundial de Cardiología, con la participación del Primer Ministro de Francia Maurice Schumman, los profesores Charles Laubry, L. Gallavardin, René Leriche, A. Clerc y Leon Binet de Francia; Ignacio Chávez de México, Sir John Parkinson de Inglaterra, Paul D. White de los Estados Unidos y Gustav Nylin de Suecia. El Comité firmante del acta constitutiva y electo por la Asamblea fue el profesor Laubry como Presidente y los doctores Paul White e Ignacio Chávez como Vicepresidentes.

El II Congreso Mundial de Cardiología tuvo lugar en Washington en 1954 bajo la dirección del Profesor Paul D. White en su calidad de Presidente de la Sociedad y del Congreso. El III Congreso regresó a Europa en Bruselas, en donde fue electo Presidente de la Sociedad y del futuro IV Congreso en México, el Profesor Ignacio Chávez.

Después de la reunión realizada en México, a la que asistieron 4,000 invitados, el Congreso Internacional de Cardiología se ha llevado a cabo en distintas ciudades de todo el orbe tales como: Nueva Delhi, Londres, Buenos Aires, Tokio, Moscú, Washington y Manila. Hasta la fecha la Sociedad Internacional de Cardiología ha tenido 16 Presidentes.

En 1978 en Tokio, bajo la presidencia de Lyie Peterson, la Sociedad Internacional de Cardiología decide fusionarse con la Federación Internacional de Cardiología creando así la Sociedad y Federación Internacional de Cardiología .

Objetivo

-Comprender la función esencial de nuestro corazón.

 

-Que causas provocan las enfermedades del mismo y cómo podemos cuidarlo.

Justificación

Me intereso por conocer la anatomía del corazón, el  saber que lo hace latir y sobre todo informar a la sociedad de los cuidados que debemos darle ya que no tomamos conciencia de lo grave que ha aumentado las enfermedades que le provocamos por lo que ha sido una causa muy común de muerte en la población.

Así mismo por qué es el motor más extraordinario, sorprendente y tan pequeño que es el que nos da vida.

Hipótesis

Si elaboro una maqueta del corazón entonces lograre comprender como está formado el corazón y su funcionamiento.

Método (materiales y procedimiento)

Exposición por medio de una maqueta en forma de corazón representando su anatomía y describir su funcionamiento a partir de lo observado.

 

Materiales:

– Un globo en forma de corazón

-periódico, engrudo

-pinturas: roja, amarilla

-plastilinas: roja, rosa, azul, crema

-mangueras

-papel cascarón

 

 

MÉTODO:

 

Realice una investigación documental en la que me apoye en páginas web. Es de suma importancia conocer nuestro corazón en cuanto a sus partes, su funcionamiento y sus cuidados ya que es uno de los órganos más importantes del cuerpo humano,  porque es el músculo más fuerte que distribuye sangre a todo nuestro organismo y es que de no ser por ella no existiría la vida. El corazón es el órgano que da vida a todo ser humano ya que es aquel que distribuye hemoglobina a todo el cuerpo.

 

Por medio de la representación de una maqueta en forma de corazón se tiene la intención de mostrar sus partes y explicar el  funcionamiento de los órganos que componen este complejo músculo del cuerpo para su buen desarrollo.

 

 

 

Detalle de cómo son las aurículas derecha e izquierda.

 

 

 

 

 

 

 

 

Detalle de la anatomía del corazón en su forma exterior.

 

 

 

Galería Método

Resultados

Por medio de esta maqueta aprendí del cómo está formado nuestro corazón y pude observar que es el órgano principal del sistema circulatorio; funciona como una bomba, impulsando la sangre a todo el cuerpo, yo me asombro de ver que trabaja siempre, es un órgano musculoso y disciplinado. Y de que a través de la circulación coronaria es como se nutre.

 

Algunas de las enfermedades cardiovasculares   pueden ser congénitas y otras pueden derivarse de nuestros malos hábitos. He descubierto que ha aumentado la muerte de las personas por no darle el cuidado perfecto. Además es afectado segundo a segundo por receptores bioquímicos por nuestras emociones negativas y positivas, por las tristezas y alegrías, el llorar  y el reír, además se deprime por causa nuestra. Para tener un corazón saludable es importante una buena alimentación, acudir constantemente al médico, hacer ejercicio y  alejándose de drogas, alcohol y diferentes sustancias tóxicas, es muy importante saber que nuestras vidas dependen de ello.

Galería Resultados

Discusión

Frente a los malos cuidados y hábitos es preocupante que no le demos importancia a nuestro corazón sabemos que estamos hechos de nervios, de arterias,  venas, hormonas, tejidos, músculos, huesos, todo ello le afecta y todavía falta lo externo como las drogas, el alimento diario, el estrés ,etc… le afecta a nuestro CORAZON.

 

Es un órgano que soporta todo, también es sensible, ama y se deprime hoy día vivimos tiempos muy difíciles y además hay tanto estrés que a la larga de nuestra existencia nuestro corazón sufre y lo dañamos tanto por nuestra mala alimentación hasta que un día o una noche no puede más y deja de latir para siempre.

Por eso es muy importante acudir al médico constantemente, una buena alimentación, hacer ejercicio, evitar sustancias toxicas y controlar nuestras emociones si queremos una vida perdurable.

Conclusiones

El corazón es una máquina incansable, asombróso, sus latidos son orden en tiempo y espacio  de los órganos más importantes del cuerpo humano ya que es el músculo más fuerte que distribuye sangre a todo nuestro organismo y es que de no ser por ella no existiría la vida.

 

Me maravillo como el latido sistólico es más fuerte que el latido diastólico, por sus diferentes funciones y como es importante saber respirar correctamente ya que necesita oxígeno, irrigación sanguínea, una excelente alimentación de calidad, el dormir adecuadamente, etc…..nuestro corazón aguanta mucho y sufre mucho.

 

El corazón es el órgano que da vida a todo ser animal y humano ya que es aquel que distribuye hemoglobina a todo el cuerpo.

 

 

Aprendí las enfermedades de las que el corazón corre riesgo si no se le da un cuidado perfecto, alejándose de drogas, alcohol, tabaco  y diferentes sustancias tóxicas que dañan al corazón y que incluso ocasionan la muerte.

Gracias a esta monografía he aumentado mucho más mis conocimientos y he profundizado mi auto educación sobre este tema; así mismo  conocí paso a paso la realización de un trabajo de gran importancia para toda persona que desea superarse y de  esta  manera aprende a ser más responsable.



Por qué debo cuidar mi corazón

Summary

Research Question

Problem approach

Background

Objective

Justification

Hypothesis

Method (materials and procedure)

Results

Discussion

Conclusions

Bibliography