El presente trabajo de investigación tiene como finalidad, dar a conocer las ventajas de la fruta y verdura deshidratada. Descubrir como en pasos fáciles y divertidos se pueden obtener snacks saludables para toda la familia.
Desde hace más de una década, en todo el mundo, se ha despertado una ola de oportunidades de negocios relacionadas con el cuidado de la salud. Las personas quieren vivir más tiempo y mejor, esto ha llevado a cambiar el estilo de vida y los hábitos de las personas.
La falta de tiempo en las familias actuales nos lleva a consumir cada vez más alimentos procesados, es por eso que necesitamos buscar alternativas de snacks saludables.
En el campo de la medicina la tendencia es hacia lo holístico y la medicina milenaria oriental; en el área del deporte destacan las actividades extremas y el ejercicio físico de bajo impacto; en el ámbito nutricional o de la alimentación, el consumo de productos orgánicos con certificación de calidad relacionados con el cuidado ambiental, la equidad de género y condiciones laborales más justas.
El mejoramiento y desarrollo de nuevas tecnologías para el procesamiento de los alimentos ha conseguido alimentos más seguros para el consumo humano, accesibles y duraderos, principalmente en productos altamente perecibles como carnes, granos, harinas, frutas y vegetales en general.
La deshidratación es una de las técnicas más utilizadas para conservar los alimentos; existe un nicho de mercado interesado en consumir frutas y vegetales deshidratados que preferentemente son utilizados por la industria alimenticia como materia prima para elaborar otros alimentos para consumo humano.
La fruta deshidratada es una alternativa para que la ama de casa introduzca el consumo de fruta en niños y jóvenes a través de snacks nutritivos que aporten los requerimientos nutricionales adecuados para este grupo de consumidores jóvenes, sin embargo, tiene inconvenientes en cuanto al precio más alto que la fruta fresca y la estacionalidad de la producción de las variedades de fruta.
No obstante, los snacks de frutas deshidratadas se pueden posicionar como una alternativa saludable a la confitería o snacks convencionales, o utilizarse para aportar interés y variedad al mercado de la comida sana.
Antecedentes de la fruta deshidratada
Todo lo que existe en este planeta, tiene un antecedente, un motivo y por ende una historia, entre los que destaca la fruta deshidratada que, al parecer en nuestros tiempos ha tenido gran aceptación por parte del público de todas las edades, al ser un alimento nutritivo y sabroso.
Pero no es algo que se haya descubierto ahora, es una técnica que se viene usando desde hace ya muchos siglos, cuando no existían los refrigeradores o los alimentos no estaban enlatados y adicionados con químicos que los conservaran por más tiempo.
El primer antecedente que se tiene de la fruta deshidratada, está liderado por la uva pasa, que según diversa documentación, la cultura de los fenicios, fue uno de los más grandes grupos humanos de la antigüedad que se sirvió de esta técnica para alimentarse. Otras culturas como los egipcios, griegos, indios y mayas, también se sirvieron de aquí para conservar sus alimentos.
Y es de donde se sabe que, todo tipo de productos se puede deshidratar.
Por otro lado, los alimentos secos, fueron de gran utilidad en épocas de grandes guerras, pues se debe saber que, uno de los principales factores que debilita a cualquiera de los dos grupos en lucha, es la falta de comida, por lo que, cuando eran tiempos de guerras, las esposas de los guerreros preparaban cantidades considerables de semillas, carnes, vegetales y frutos, para que sus esposos tuvieran con que alimentarse y sobrevivir a la guerra.
Por ejemplo, en los Diarios de navegación de Cristóbal Colón, se documenta que una de las principales fuentes de alimentación de él y sus tripulantes, fueron los alimentos desecados, pues no olvidemos que navegaron por largos meses en alta mar y era difícil tener acceso a otro tipo de comidas, por lo que fueron suficientes para mantener vivos a todas las personas que con él se aventuraban a nuevas tierras.
Siglos después, se dieron cuenta que el consumir alimentos deshidratados, traía grandes beneficios en el cuidado de piel y todo lo que respecte a la cosmética, pues se aprovechaban todos los nutrientes al máximo y la piel era una de las partes, sobre todo
de las mujeres, que buscaban embellecer con más urgencia, por eso consumían mucha fruta deshidratada, semillas, nueces y un sinfín de alimentos.
En la actualidad, muchos creen estos alimentos deben comerse solos, o sea, no se pueden acompañarse con nada y que se comen como botanas, pero esto es una gran mentira, ya que se pueden usar en diversas recetas de cocina. Para que se vea esto no es mentira, no olvidemos que los famosos chiles en nogada, alimento que según la histora inventaron las monjas de un convento poblano para el emperador Iturbide, llevaban acitrón, un fruto seco que le daba mucho sabor al platillo.
Como bien se expone en este texto, la fruta y comida seca, lleva siglos en la historia de la humanidad, por eso empresas como Instantia, han recuperado estos procesos de disecado de frutos y alimentos, para que todas las personas tengan acceso a ellos. Entre las ventajas de incorporar estos alimentos a nuestra cocina y dieta, se encuentran los siguientes:
La fruta seca o fruta desecada es un producto que se obtiene del secado realizado a diversas frutas especiales, propensas a este proceso; a diferencia de los frutos secos que no requieren generalmente de este proceso para ello. En su elaboración se llega a reducir el contenido de humedad en el cuerpo de la misma hasta llegar a un 20 % del peso. Este proceso de deshidratación tiene dos finalidades: su conservación (alargar su vida útil) y reforzar su sabor.
La tradición de la fruta seca se remonta al cuarto milenio antes de la era común en Mesopotamia.
Se las puede considerar como un simple aperitivo, o incluso algunas cocinas del mundo las suelen emplear como ingredientes en la elaboración de algunos platos, por ejemplo, en las espinacas a la catalana. También se emplean en algunos postres, caso de las uvas pasas que se emplean a menudo junto con las frutas confitadas.
Plátano, Calabaza, Ciruela pasa, Coco, Dátil, Higo, Mango, Papaya, Pasa, Piña.
Realizar un proceso de deshidratación de frutas y verduras fácil, para aprovechar al máximo estos alimentos y tener una alternativa de snacks saludables y económicos.
Las frutas y verduras deshidratas se ofrecen en muchos lugares considerando un alimento nutritivo y fácil de almacenar sin embargo los precios son muy elevados, entonces me surgió la idea de realizar este proceso en casa con frutas y verduras de temporada con esto se aprovechan en su totalidad ya que los alimentos que no se consuman en el momento se pueden deshidratar resultara más económico fácil de realizar.
Si realizo el proceso de deshidratación en casa de alimentos de temporada los cuales encontramos en el mercado a precios bajos, entonces puedo almacenarlos sin problema que se descompongan de forma natural, conservando los nutrientes y el sabor, pero con un mayor tiempo para consumirlos de forma segura y económica.
Paso 1.
Lavar y desinfectar el deshidratador, así como leer las instrucciones de uso, recuerda siempre realizarlo bajo la supervisión de un adulto.
Paso 2.
Lavar y cortar las frutas de tu preferencia.
Colocarlas de acuerdo con las instrucciones del deshidratador, en este caso se colocaron una fruta por charola, a 65°
Paso 4.
Revisamos a las 4 horas como iba el proceso de deshidratación, en total quedaron listas en 8 horas.
Una vez que tengan la textura que desees puedes empacarlos en bolsitas para conservarlos mayor tiempo. Este tipo de frutas se utiliza de snack, decoración y fuente de energía.
Después de 8 horas de proceso de deshidratación de las frutas, descubrí que no pierden su sabor, que es muy fácil de realizarlo y además su almacenamiento es muy práctico
Mis conclusiones de este proyecto son: