La donación es un gesto altruista, considerado como el mayor acto de bondad entre los seres humanos.
Los trasplantes más comunes en el país son los de riñón, córneas, hígado y corazón.
En la actualidad, la mayoría de los donantes son multiorgánicos, y se han desarrollado soluciones con mayor eficacia protectora.
Hay miles de personas que para seguir viviendo o mejorar su calidad de vida necesitan de un trasplante.
México tiene la necesidad de desarrollar una cultura de donación de órganos para preservar miles de vidas.
Cada 10 minutos otra persona se suma a la lista de espera de trasplantes.
La realidad es que las listas de espera para recibir órganos y tejidos seguirán aumentando si no se logra aumentar el número de donaciones.
La única forma de resolver este problema es ser donante de órganos y animar a otros nuestros conocidos a que también lo sean; cuantos más donantes existan, mayor será el número de vidas que podrán salvarse.
¿Qué factores intervienen en la donación de órganos?
Aunque la literatura médica contemporánea limita la historia de los trasplantes a los últimos 100 años y le da crédito al cirujano suizo Jacquet Riverton como el primero en intentar un trasplante, existen ciertos cuentos mitológicos de varias culturas religiosas, incluyendo la hindú, la china y la egipcia que surgieron de la idea de que el “trasplante” puede ser mucho más antigua.
La historia temprana del trasplante de órganos ha sido relacionada con los anhelos de la longevidad del ser humano.
En el Siglo II AC., el cirujano chino Pien Ch´iao en apariencia realizó el trasplante de una variedad de órganos y tejidos. Sin embargo, el clima científico de China durante este periodo no era favorable al arte quirúrgico y estos reportes han sido considerados como historias y leyendas populares a lo largo de generaciones.
En 1804 Guiseppe Baroni (1759-1811) de Milán publicó sus experimentos exitosos de trasplantes cutáneos en ovejas. Dieciocho años más tarde, Johann Dieffenbach (1792-1847) especializado en trasplantes de piel y cirugía plástica, publicó su tesis en trasplante experimental y regeneración de tejidos.
El deseo del ser humano de mejorar su salud o su aspecto físico parece consustancial a su naturaleza. Civilizaciones tan antiguas como la persa, la griega, la egipcia muestran en su arte diferentes manifestaciones de una visión idealizada del cuerpo humano, utilizando partes de animales, lo que le otorgaría propiedades al alcance solo de los dioses. Por tanto, el “xenotrasplante” se encuentra en el imaginario del hombre desde hace muchos siglos.
Un primitivo concepto de trasplante aparece en muchas culturas antiguas a través de formas quiméricas de héroes, reyes y dioses ideadas con el fin de resaltar las virtudes de estos seres.
Probablemente el más antiguo y famoso ejemplo lo constituya Ganesha, dios hindú de la sabiduría y vencedor de todos los obstáculos: un dios surgido de un niño Kumar, a quien el rey Shiva trasplantó una cabeza de elefante. Esta cabeza de elefante trasplantada explicaba su sabiduría y fortaleza.
Con el paso de los siglos, el pensamiento cristiano recoge estos mitos y los transforma, a través de los milagros. De los ejemplos posibles, hay que destacar el “milagro de San Cosme y San Damián” profusamente recogido en el arte sacro y que muestra el momento en que estos dos médicos de la época romana sustituyen la pierna enferma de Justiniano, por la pierna sana de un esclavo.
Sin duda, se trata del primer aloinjerto de la Historia, ocurrido sólo en el imaginario de las personas.
Durante la Edad Media, poco más se puede decir del desarrollo científico de los trasplantes. En el área de la cirugía se producen avances y en 1597 Gaspar de Tagliacocci publica un tratado quirúrgico, que recoge la técnica del autotrasplante nasal que aún se realiza en la actualidad.
El primer paso importante para el desarrollo científico de los trasplantes tiene lugar en los inicios del Siglo XX y se relaciona con el descubrimiento de la sutura vascular por parte de un investigador francés, Alexis Carrel.
Por tanto, el origen de los trasplantes de órganos está muy ligado al desarrollo de la cirugía vascular. Con este avance, entre los años 1900 y 1915 se realizan los primeros trasplantes en animales. El animal elegido fue el perro y el órgano, el riñón.
Trasplante renal
La experiencia obtenida en el trasplante renal ha posibilitado la expansión y el progreso en el trasplante de otros órganos. En 1963 Starzl realizó en Denver un primer intento de trasplante hepático en el hombre, pero no es hasta 1967 cuando tiene lugar el primer trasplante con supervivencia prolongada realizado en la Universidad de Colorado a una niña de un año y medio de edad.
Los trabajos realizados por Starzl a partir de este momento, así como los de Calne y Williams permitieron que la mejoría de resultados fuera tal que lo que se consideraba un tratamiento experimental, pasara a ser una alternativa terapéutica.
En 1967 tiene lugar también el primer trasplante cardíaco; se realiza en Ciudad del Cabo (Suráfrica) por parte de Barnard en un receptor de 58 años, enfermo de una insuficiencia cardíaca terminal.
El éxito del trasplante tiene una gran repercusión científica y mediática y, aunque la supervivencia del paciente fue de 18 días, este trasplante supuso el despegue definitivo de los programas de trasplante.
Trasplante pulmonar
El primer intento de trasplante pulmonar en el hombre lo llevó a cabo Hardy de la Universidad de Mississipi
Las primeras décadas de los trasplantes mostraron resultados desalentadores. A finales de los años sesenta el trasplante renal seguía siendo una intervención experimental de elevado riesgo: entre un 30 y un 40 % de los trasplantados con riñón de cadáver fallecían en el primer año, y la sépsis era la primera causa de muerte. El porcentaje de riñones funcionantes al año del trasplante era muy bajo. Similar situación se daba con el trasplante cardíaco y hepático. El descubrimiento de la ciclosporina como base de la inmunosupresión en 1980, la utilización de técnicas terapéuticas inmunosupresoras combinadas y el progreso en las técnicas quirúrgicas, fueron produciendo una mejora progresiva de los resultados y de la supervivencia de los pacientes trasplantados hasta la situación actual.
El primer trasplante experimental de un órgano completo fue practicado en 1902 por Emerich Ullmann (1861-1937), un cirujano húngaro de Viena. Alexis Carrel, trasplantó órganos animales como el riñón, el corazón y el bazo, y descubrió que podían funcionar por un periodo de tiempo.
¿Qué órganos se pueden donar?
Los órganos que se pueden donar son los riñones, el hígado, el corazón, el páncreas, el estómago, el intestino y los pulmones.
Además, de una donación también se pueden obtener tejidos, igualmente muy necesarios, como hueso, las córneas y las válvulas cardíacas.
¿Se puede elegir qué órganos donar?
Dada la escasez de órganos para trasplante, de cada donación se intenta obtener el mayor aprovechamiento posible. Lo habitual es que la donación sea completa, no obstante, si usted desea no donar algún órgano y/o tejido, basta con haberlo expresado en vida a sus familiares. Ellos comunicarán su voluntad tras el fallecimiento.
¿Cuál es el único órgano que no se puede trasplantar?
La cabeza. Esta es una de las partes del cuerpo humano que no pueden ser trasplantadas, y los investigadores tienen claro que no podrá serlo en mucho tiempo.
El principal problema es su indispensable conexión con la médula espinal.
¿Cuántas veces se puede trasplantar un órgano?
Tras el fracaso de un primer injerto, es posible realizar un segundo o un tercer trasplante, y hasta un cuarto.
Tipos de trasplante de órganos humanos:
Es el procedimiento mediante el cual se lleva a cabo el traslado de tejidos u órganos de la misma persona, de un lugar a otro del mismo organismo.
Es el injerto de órganos entre personas distintas, pero muy similares desde el punto de vista genético, al grado que aparentan ser idénticos.
Es el transporte de tejidos u órganos de un individuo llamado donante a otro denominado receptor, perteneciendo ambos a la misma especie, pero genéticamente diferentes.
Se realiza con fragmentos de tejido no del todo desprendidos del organismo del donante, como el caso del desprendimiento de piel, para que se dé una restauración natural.
Reconstrucción de uno o más canales como vasos, bronquios, entre otros.
Es el procedimiento quirúrgico a través del cual se injerta tejido u órganos, siendo el receptor un ser humano y el donante de los componentes un animal.
Es importante que el tejido u órgano injertado pueda continuar con sus funciones de forma duradera en la vida del receptor.
Se produce en el interior del cuerpo del receptor, creando anticuerpos de defensa. Las defensas protegen también el cuerpo contra las infecciones.
El rechazo ocurre cuando el sistema inmune produce anticuerpos para intentar destruir el nuevo órgano
Ocurre entre los glóbulos blancos del órgano donado y el cuerpo del paciente trasplantado. Puede provocar la muerte.
Tiempo estimado que pueden permanecer los órganos fuera del cuerpo
Órgano o tejido | Tiempo |
Riñón | 48 a 72 horas |
Hígado | 24 a 30 horas |
Corazón | 4 a 6 horas |
Pulmones | 24 horas |
Córnea | 5 a 7 días |
Piel | Indefinido |
Hueso | Indefinido |
Regeneración
Consiste en la actividad reconstructiva desarrollada por el propio organismo receptor a fin de restablecerse del trauma del trasplante y comenzar la tarea regeneradora de tejidos, vasos sanguíneos y nervios sobre el lugar de la cirugía.
Donadores vivos
Un trasplante con donante vivo es una opción en donde, en lugar de esperar por un órgano compatible de un donante muerto, recibirán uno de un donante vivo. En esta situación, un donante vivo debería ser una persona sana, tanto mental como físicamente.
En algunos casos, los donantes vivos son la única esperanza para que algunos pacientes tengan una segunda oportunidad para vivir. Los donantes vivos tienen la oportunidad de salvar una vida mientras aún están viviendo.
Los donadores vivos pueden utilizarse a condición de que su consentimiento sea informado libre y legalmente adecuado después de haber recibido una explicación minuciosa de las posibles consecuencias.
La pregunta más preocupante ha sido ¿Se justifica que los médicos arriesguen la vida de una persona con el objeto de salvar la vida de otro?
Riesgos
Los riesgos se inician con los estudios invasivos a los que el donador es sometido como parte de la valoración preoperatoria. Las complicaciones graves de la angiografía son poco frecuentes y, que sepamos no ha habido muertes de posibles donadores a consecuencia de este procedimiento.
Sin embargo, parece que los problemas emocionales posteriores son excepcionales.
“Las consecuencias psicológicas posteriores importantes a largo plazo parecen afectar únicamente a un pequeño número de donadores”.
Por supuesto que la complicación más temida es la muerte del donador, que en ocasiones ha ocurrido.
Beneficios
Donadores cadavéricos
La identificación y selección de un donante cadáver es un procedimiento complejo y multidisciplinar que involucra varios equipos médicos, además de la infraestructura general del hospital, la ligada a aspectos forenses y jurídicos relacionados con la certificación de la muerte y el cumplimiento de las leyes y reglamentos de trasplante vigentes en cada país.
En general, son donantes todos aquellos cadáveres en situación de muerte cerebral por traumatismo craneoencefálico, accidente cerebrovascular, anoxia cerebral o tumores benignos no metastatizantes.
Para la identificación y detección de donantes potenciales ayuda la valoración de la lesión cerebral según la Escala de Glasgow. Una puntuación de 6 o menos orienta hacia la posibilidad de ser donante de órganos antes de que se establezca el diagnóstico de muerte cerebral.
Diagnóstico de muerte cerebral
El diagnóstico de muerte cerebral debe ser establecido por médicos independientes del grupo de trasplantes para evitar un conflicto de intereses.
Asimismo, se requiere la certeza de ausencia irreversible de función cerebral, que será confirmada con dos exploraciones neurológicas expertas, separadas por un intervalo de al menos 6 horas, si se conoce la causa de la muerte, o de 24 horas en caso de encefalopatía anóxica o desconocimiento de la causa de la muerte. En su defecto, puede ser válida una sola exploración neurológica más un electroencefalograma plano. En los niños se requieren dos exploraciones neurológicas y 2 electroencefalogramas con un intervalo de 24 horas.
La ausencia de flujo sanguíneo cerebral es la manifestación más clara de muerte cerebral. En situaciones de impregnación barbitúrica u otros fármacos o drogas depresoras del sistema nervioso central, el diagnóstico de muerte cerebral debe establecerse también con una exploración clínica compatible, más alguna de las pruebas diagnósticas mencionadas que confirmen la ausencia de flujo cerebral. El electroencefalograma no es válido en esta situación.
¿Quién puede ser donante?
Puede ser donante de órganos toda persona que en vida decida que, a su muerte, sus órganos sirvan para salvar o mejorar la vida de otros. Sin embargo, debe saber que, pese a nuestro deseo de ser donante de órganos, no todos podremos serlo, ya que, para ello, será necesario que el fallecimiento acontezca en una Unidad de Cuidados Intensivos de un hospital. Es en estas unidades dónde es posible realizar la preservación de los órganos y las pruebas necesarias para realizar una correcta valoración de cada potencial donante.
Será el equipo médico quien, una vez realizadas todas las pruebas necesarias, dictamine si el fallecido puede ser donante y de qué órganos.
Selección y valoración del donante
Uno de los aspectos más relevantes para los grupos de trasplante es la consideración de la edad límite del donante cadáver, fundamentalmente por el incremento de la edad de éstos.
Gracias a los buenos resultados de los programas de trasplante, la edad ha sido un factor que no ha cesado de incrementar con un techo que quizás no está todavía cerrado.
¿Qué se requiere para ser donador?
Para ser donador se requiere estar registrado en la lista nacional de donadores y cumplir con los requisitos, que no implican mayor esfuerzo de los aspirantes, sino más que otra cosa, tener voluntad y estar convencidos de la misión altruista que implica para la sociedad.
Requisitos para ser donador:
1.- Es necesario firmar la credencial de donador en presencia de dos testigos que también la firmarían.
2.- Es indispensable portar siempre esta credencial.
3.- Es primordial expresar a los familiares que se es donador, ya que, aun contando con una credencial firmada, los familiares serán consultados para autorizar la donación en caso de muerte.
4.- Es importante llenar la hoja de registro que proporciona el Centro Nacional de Trasplantes, para quedar incluido en la lista nacional de donadores.
Necesidad de un trasplante
El tener que buscar o esperar un posible donador, genera diversas reflexiones y emociones. Siendo una de las reacciones más comunes la desorientación, por no saber dónde comenzar ni cuándo va acabar esta época de zozobra.
Consentimiento familiar y donación.
Según la Ley de trasplantes todos somos considerados donantes si en vida no hemos expresado lo contrario. Sin embargo, esa expresión puede haber sido formulada de diferentes modos, lo que obliga a que se pregunte a familiares o allegados sobre la voluntad del fallecido respecto a la donación. En la práctica siempre se respeta la decisión de la familia, ya que se asume que estos no contradirían los deseos de su ser querido. La firma de la familia para proceder a la donación, es lo que denominamos consentimiento familiar.
Es conveniente hacer hincapié en que la donación de órganos cadavéricos, requiere de la autorización expresa de los parientes más cercanos de acuerdo al siguiente orden:
Ante la recurrente negativa de los familiares, pues:
En consecuencia, al fallecer, los órganos de la persona serian extraídos para ser trasplantados, cumpliendo con el deseo del individuo sin requerir el consentimiento de los deudos.
Otra alternativa, que también se encuentra en discusión, es la de crear una tarjeta con validez universal, la cual se encuentra revestida con fuerza legal suficiente para que sea acatada independientemente del parecer de los deudos.
Habrá que esperar a conocer cuál será el alcance que el personal médico, las autoridades sanitarias y las agencias del Ministerio Público, le den al nuevo documento oficial mediante el cual se manifieste el consentimiento expreso de todas aquellas personas cuya voluntad sea donar sus órganos después de su muerte, a fin de que sean utilizados en trasplantes.
La información a los familiares y el consentimiento informado son quizás los mayores desafíos para los profesionales de la salud.
Una esperanza de vida
Infinidad de niños, jóvenes y adultos de ambos sexos que desean llevar una vida socialmente útil son, en muchos de los casos, quienes aguardan con esperanza la donación de un órgano, mismo que por falta de una gran cultura de la donación de órganos en México, solo se ha convertido en una esperanza de vida, y cuyo trasplante no se realizara si no existe suficiente información, el compromiso de la sociedad y la conciencia de esta necesidad por parte de todos.
Hagamos una profunda reflexión y, en su lugar, también la concibamos como una acción de recibir: ¿Qué pasaría si nosotros fuéramos quienes requerimos de un órgano o tejido para salvar nuestra vida?
Mitos en torno a la donación y trasplante de órganos
Hemos escuchado comentarios en torno a la donación de órganos, que desalientan esta noble causa los cuales pueden tener varios orígenes como pueden ser noticias de periódicos amarillistas, comentarios de conocidos que presumen que ellos saben de “buena fuente” de ciertas personas que han vivido experiencias al respecto y desvirtúan su fin altruista a mitos ignorantes.
Propuestas para lograr una mayor concientización de la donación de órganos
Mientras tanto, en el presente y ante la escasez de órganos donados, los científicos se ocupan de utilizar el ingenio y la investigación al buscar alternativas de solución como desarrollar un corazón artificial que sustituya de manera permanente al dañado, fabricado con titanio y materiales especiales que evitan el rechazo.
Con ejemplos como este, el futuro presagia descubrimientos y aplicaciones que cambiarán y salvarán vidas.
Dar a conocer cómo se lleva a cabo la donación de órganos y así sensibilizar a la sociedad.
Es importante conocer cómo se logra salvar vidas a través de la donación.
Si doy a conocer cómo es la donación de órganos, entonces se pueden salvar más vidas.
Para la realización de este proyecto se hizo una investigación documental en diferentes fuentes como libros, revistas e información de internet.
También se efectuó una investigación experimental en donde entrevisté a un paciente al que se realizó trasplante de córnea con resultado exitoso y le pregunté cuáles son sus impresiones sobre esta técnica.
Él me platicó que su operación fue programada debido a que recibieron la córnea de un donante extranjero la cual era compatible.
La cirugía duró 2 horas y ese mismo día regresó a casa.
Me comentó que los primeros días tuvo mucho dolor aun habiendo tomando medicamentos, lo cual no le permitía dormir bien.
También que fue muy cuidadoso al seguir las indicaciones del médico tales como mantener cubierto su ojo y no mojarlo cuando se bañaba.
De su cirugía a la fecha han transcurrido 3 meses y me comenta que ha recuperado su visión poco a poco.
Obteniendo los siguientes resultados:
Resultados
Después de recibir el trasplante, se ha convencido de que la donación de órganos mejora la calidad de vida de las personas.
También que fue muy cuidadoso al seguir las indicaciones del médico tales como mantener cubierto su ojo y no mojarlo cuando se bañaba.
De su cirugía a la fecha han transcurrido 3 meses y me comenta que ha recuperado su visión poco a poco.
Después de recibir el trasplante, se ha convencido de que la donación de órganos mejora la calidad de vida de las personas.
El paciente que recibió el trasplante de córnea menciona que es de suma importancia la donación de órganos ya que cambias la calidad de vida de las personas.
Actualmente los problemas principales en trasplante de órganos son dos: la carencia de suficientes órganos para trasplante y resolver el rechazo inmunológico.
La carencia de órganos es reflejo de que existe más demanda que oferta. Existen más órganos enfermos que órganos sanos para sustituirlos.
La necesidad inventó al trasplante y este a su vez influenció, fertilizó, fomentó y contribuyó a otros campos de manera que el beneficio a la humanidad fue mucho más que el medio millón de pacientes trasplantados.
La posibilidad de trasplantar órganos y tejidos humanos (o de animales) para salvar otras vidas humanas, es una hazaña reciente de la alta tecnología médica.
Se requieren cambios en la dinámica hospitalaria para mejorar los procesos de donación y no solo atribuir el bajo número de donaciones y trasplantes a la negativa de los familiares del posible donante. Hay que pugnar por programas que garanticen la calidad y faciliten la auditoría interna y externa en los hospitales y en los diversos servicios médicos involucrados, con la finalidad de su mejora continua y de eliminar los obstáculos que impiden alcanzar cifras similares a las de países exitosos en la donación y trasplante de órganos.
No todas las personas inscritas como donantes pueden donar. De hecho, solo 3 de cada 1,000 personas mueren en circunstancias que les permiten donar órganos. Por eso se necesitan más donantes dispuestos.
El problema esencial no radica en la falta de equipo y de personal técnico especializado, sino en la ausencia de una cultura de donación que estimule a la sociedad a que proporcione voluntariamente los órganos vitales que se requieren para salvar muchas vidas.
La donación de órganos toma órganos y tejidos sanos de una persona para trasplantarlos en otras. Los especialistas dicen que los órganos de una persona donante pueden salvar o ayudar hasta 50 personas. Los órganos que se pueden donar incluyen: riñones, corazón, hígado, páncreas, intestinos, pulmones.
Más de 21 mil personas necesitan un trasplante de riñón, hígado o corazón para salvar su vida.
La donación de órganos es un deber moral que tendría que inculcarse desde temprana edad. Con ello se logrará una concientización logrando erradicar la ignorancia que existe al respecto y así lograr mejorar la calidad de vida y/o salvar vidas de las personas sin distinciones sociales.
Libros
Trasplante
Humanismo, Ética y Sociedad
Eduardo A. Santiago-Delpin
Editorial “El manual moderno”
Donación y trasplante de órganos, tejidos y células
Mitos y realidades
Melchor Ayala Salazar
Editorial “Trillas”
Vivir un trasplante de órganos
Elizabeth Parr
Janet Mize
Revista
Muy interesante
Año XIV No.008
Pág. 72,73, 74 y 77
Internet
https://trasplantes.net/index.php/men-sobre-los-trasplantes/historia-de-los-trasplantes
http://www.ont.es/informacion/Paginas/Donaci%C3%B3n.aspx
https://www.nefrologiaaldia.org/es-articulo-evaluacion-del-donante-cadaver-preservacion-240