Ariel Moreno Campos, Santiago Jocsan Del Razo Nieves
En el presente trabajo se podrá encontrar información sobre la percepción en los juegos mentales. También se realizó la aplicación de juego mentales a personas adultas y niños para poder comprobar las teorías que existen acerca de la percepción visual.
Enfrentarse a un juego mental puede ser un gran reto. Dentro de estos se busca entrenar la percepción visual, la atención focalizada así como la velocidad de procesamiento. Si la sociedad no posee una capacidad de percepción se dificulta el pensamiento amplio y de velocidad.
Según la editorial Planeta Agostini nuestro cuerpo está formado por muchos órganos distintos, cada uno de los cuales cumple una determinada misión.
Además, para que nuestro organismo funcione correctamente, todos sus órganos deben actuar sin problemas y coordinadamente.
Órganos
Los órganos son una unidad funcional de un organismo multicelular que constituye una unidad estructural y realiza una función determinada.
“Los órganos son estructuras formadas por la asociación de diversos tipos de tejidos que se encargan de realizar actos concretos.
Fig. 1 Portada oficial del libro El cuerpo humano.
Cerebro
Nuestro cerebro tiene un 85% de agua y parece una nuez gigante de color gris. El tejido del cerebro tiene 2 colores: Gris y blanco. La materia gris está formada por neuronas, que hacen que pienses y sientas. La materia blanca la forman otra clase de células que soportan y protegen a las neuronas y sus conexiones.
Fig. 2 Imagen que representa las partes que forman el cerebro.
Los tres principales componentes del cerebro son el encéfalo, el cerebelo, y el tallo cerebral.Este es el encéfalo. La corteza cerebral es la porción externa del encéfalo, también llamada “materia gris”. Genera pensamientos intelectuales más complejos.
¿Qué controla el cerebro?
Es el centro de coordinación de actividades sensoriales e intelectuales como la memoria y la resolución de problemas. También controla el movimiento del cuerpo.
El cerebro es el órgano social del cuerpo, base estructural de nuestros procesos mentales que se encuentra entre las paredes del cráneo, como corolario de nuestro sistema nervioso. Las reacciones que sentimos son las alertas que la produce nuestro cerebro y que envía señales nerviosas a través de los nervios sensoriales
Fig. 3 Imagen de una página del libro El cuerpo humano.
Juegos mentales
Analizando la información de National Geographic (creadora del programa de televisión JUEGOS MENTALES) los juegos mentales Descifrar el funcionamiento de nuestra mente en contextos de juego puede ayudar a explicar cómo tomamos decisiones en situaciones complejas y en qué las basamos. Los juegos de todo tipo, desde los de mesa hasta las adivinanzas, constituyen un método de aprendizaje para la mente. Estás mismas pueden ser escritas, orales y la forma más común es con imágenes.
Fig. 4 Portada del programa de televisión JUEGOS MENTALES.
Psicología
Ciencia que estudia los procesos mentales, las sensaciones, las percepciones y el comportamiento del ser humano, en relación con el medio ambiente físico y social que lo rodea.
La palabra proviene del griego: psico- (alma o actividad mental) y -logía (estudio). Esta disciplina analiza las tres dimensiones de los mencionados procesos: cognitiva, afectiva y conductual.
Percepción
De acuerdo con Editorial SALVAT el cerebro tiene un funcionamiento de visión propia llamada percepción.
La percepción visual es un proceso activo con el cual el cerebro puede transformar la información lumínica captada por el ojo en una recreación de la realidad externa. La percepción de cada persona depende de 3 cosas: El conocimiento de la persona sobre el objeto, el movimiento del objeto, e incluso a veces de la personalidad de la persona.
Cuando vemos un objeto la señal pasa por el cristalino, posteriormente por la iris, seguido por la retina, después por el nervio óptico, finalmente termina llegando a la zona visual del cerebro.
El proceso de la percepción visual
Los objetos emiten o reflejan radiaciones luminosas de distinta frecuencia e intensidad que penetran en el interior del globo ocular a través de la pupila. La pupila se dilata o contrae en función de las condiciones lumínicas por la acción del iris. Después, la señal luminosa pasa por la córnea, el cristalino y la cámara interior acuosa hasta llegar a la retina, la parte fotosensible del ojo, dónde se encuentran las células ganglionares, bipolares y fotorreceptoras (los conos y los bastoncillos, las únicas células sensibles a la luz). Hay, también, otros dos tipos de células: las células horizontales, que conectan entre sí a los conos y los bastoncillos, y las células amacrinas, que conectan las células bipolares con las ganglionares. La retina es un tejido fotorreceptor que cubre la mayor parte de la superficie interior del ojo y constituye el plano sobre el que se proyectan las imágenes de forma invertida. En la retina, los fotorreceptores (conos y bastones) transforman la luz en energía electroquímica que se transmite al cerebro a través del nervio óptico.
La energía electromagnética que incide sobre los conos y los bastoncillos se transforma en impulsos nerviosos que llegan hasta las células ganglionares, cuyos axones se unen para formar el nervio óptico en el disco óptico, llamado punto ciego porque carece de células fotorreceptoras y no es sensible a la luz. Los impulsos nerviosos, que proceden de la retina, llegan a través del núcleo geniculado lateral (NGL) del tálamo hasta la corteza visual del cerebro, situada en el lóbulo occipital, donde se produce la propia percepción.
Los haces nerviosos de cada ojo se encuentran en el quiasma óptico, donde parte de ellos se cruzan para ir a parar al hemisferio cerebral opuesto. Las fibras que salen del lado izquierdo de ambas retinas (y que corresponden al lado derecho del campo visual) se proyectan hacia el hemisferio izquierdo, y las que salen del lado derecho de ambas retinas (y que corresponden al lado izquierdo del campo visual) se proyectan hacia el hemisferio derecho (fig. 1).
Fig. 5 La luz penetra en el interior del glóbulo ocular y se convierte en impulsos nerviosos.
Los haces nerviosos de cada ojo se encuentran el quiasma óptico, donde parte de ellos se cruzan para ir al hemisferio cerebral opuesto (en rojo, en la parte superior del cerebro). Los impulsos nerviosos llegan al tálamo y finalmente hasta la corteza visual (en rojo, en la parte inferior del cerebro).
Mecanismos básicos de la visión
Hay tres mecanismos que intentan explicar el proceso básico de la visión. Estos son: los campos receptivos, la inhibición lateral y la magnificación cortical.
Las células ganglionares se conectan con las células fotorreceptoras (los conos y los bastones) y funcionan de acuerdo con la estimulación recibida en el llamado campo receptivo. Se distinguen dos tipos de respuesta de los campos receptivos: de centro encendido y de centro apagado.
Las células ganglionares se activan al máximo cuando las células receptoras del centro se activan y las de la periferia se mantienen inactivadas (centro encendido). En sentido contrario, las células ganglionares de los campos receptivos de centro apagado se activan cuando son activados los receptores de la periferia y los receptores del centro del campo quedan inactivados (centro apagado). Es un mecanismo antagónico que permite una percepción óptima del contraste.
Fig. 6 Representación de la corteza visual. La activación sincrónica de diferentes neuronas de distintas áreas cerebrales podría explicar, en parte, el proceso visual cognitivo.
Es importante distinguir que los conos son muy eficaces en la percepción de contornos, contrastes y colores en condiciones de mucha luminosidad, mientras que los bastones funcionan mejor en condiciones de baja luminosidad.
Este fenómeno explica las diferencias entre las conexiones de las células ganglionares con los conos y los bastones. Es decir, un cono se conecta con una célula ganglionar y varios bastones son conectados con una misma célula ganglionar.
Otro mecanismo básico de la visión es la inhibición lateral. Este fenómeno se produce cuando un estímulo induce efectos opuestos en el centro y la periferia de un campo receptivo. Estas regiones antagonistas compiten entre si y la célula ganglionar a la que están conectadas se mantiene prácticamente inactivada. De este modo se explica la percepción del contraste.
El tercer proceso es el que se conoce como magnificación cortical. La organización del sistema visual en el córtex del cerebro mantiene una cierta fidelidad con los objetos externos. Es decir, en el córtex visual se proyecta en cada momento un mapa topológicamente equivalente a la imagen externa. Sin embargo, la zona de enfoque principal de la imagen externa requiere una proyección mayor en la zona cortical que las zonas periféricas de la imagen.
El proceso cognitivo y la corteza visual
Toda la información que se recibe a través de los ojos llega al cerebro, dónde se procesa. Se conocen unas 30 áreas visuales localizadas en los lóbulos occipitales, parietal, temporal y frontal de la corteza cerebral. Cada área extrae diferentes tipos de información de la señal de entrada visual; desde los rasgos más elementales como la frecuencia espacial, orientación y contraste (áreas del lóbulo occipital), hasta los rasgos más complejos tales como el movimiento, el color o la forma de los objetos (propio de las regiones parietal temporal y frontal de la corteza cerebral).
Hay una organización jerárquica entre 5 las áreas visuales. Todas las áreas están altamente interconectadas, pero cada una de ellas está especializada en una parte del análisis funcional de la información. La cognición visual es el resultado de interacciones recurrentes entre las distintas áreas visuales.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que generalmente no miramos una escena de forma estática, los ojos se mueven buscando las partes «interesantes» de una escena para construir un mapa mental de la realidad observada.
El ojo humano hace movimientos oculares rápidos (conocidos como movimientos sacádicos) debido a que únicamente la parte central de la retina, la fóvea, tiene una alta concentración de conos. La fóvea es la parte de la retina encargada de la visión en alta resolución. El resto de la retina está tapizada básicamente por bastones, células fotosensibles monocromáticas, especialmente buenas en la detección del movimiento. Es decir, el ojo capta pequeñas partes de una misma escena para optimizar sus recursos. Si toda la escena fuera vista como lo que entendemos por alta resolución, el diámetro del nervio óptico debería ser incluso mayor que el del propio globo ocular. Además, un procesado de toda la escena requeriría también un cerebro varias veces superior al que tenemos. Por este motivo, en el proceso de percepción visual primero tiene lugar la detección de los bordes del objeto que miramos, después se inicia el proceso de estereoscopia, el fusionado de las dos imágenes procedentes de los dos ojos. Este proceso tiende a construir la superficie de la imagen, añadiendo textura, profundidad y orientación, captando movimiento y color. A continuación, se lleva a cabo el rellenado cognitivo del fondo, es decir, el cerebro construye la totalidad de la escena a partir de las pequeñas partes que visualiza mediante rápidos movimientos oculares prácticamente imperceptibles.
Fig. 7 Imagen representativa de las neuronas de la vista.
En el tramo final de todo el estímulo visual se ha descrito la existencia de señales neuronales de tipo retroalimentación en el córtex visual. Estas señales de modulación tardía se asocian con varias zonas cognitivas como la conciencia visual, la atención y la memoria visual.
Algunos estudios recientes han demostrado que la interpretación que hacemos de los estímulos generados en nuestros ojos está condicionada por las presunciones que hacemos previamente sobre el entorno. Por lo que, en el proceso de la percepción visual, el cerebro parece que construye, en parte, lo que vemos.
Como se ha comentado en párrafos anteriores, vemos mejor aquellas cosas a las que dirigimos la mirada directamente pero, puesto que el cerebro construye parte de la realidad, las suposiciones que hacemos acerca del entorno condicionan la percepción final. Por ejemplo, cuando confiamos en las sombras para juzgar la forma de un objeto, lo que estamos haciendo en realidad es suponer la reflectancia de la superficie del objeto, así como su iluminación.
Fig. 8 Imagen que representa el proceso de la vista.
Algunos estudios sugieren que sin este tipo de presunciones, las posibilidades de interpretar los estímulos visuales serían muy limitadas. Así, si parte de la percepción depende de nuestras propias presunciones, está claro que lo que nos muestra el mundo real no tiene por qué ser lo que percibimos. Los ojos sólo son responsables de una parte de la percepción visual, el cerebro hace el resto. En definitiva, podríamos decir que se trata de un acto de reconstrucción interpretativa.
Limitaciones del sistema visual: las ilusiones ópticas
Las ilusiones ópticas son una ilusión del sentido de la vista que induce a percibir la realidad de forma errónea. Entender estos fenómenos permite comprender las limitaciones del sentido visual y conocer las posibles distorsiones del color, la dimensión y la perspectiva de la escena que observamos. El origen de las ilusiones ópticas puede ser fisiológico, como un deslumbramiento, debido a una estimulación excesiva que deja por unos instantes saturados los receptores luminosos de la retina; o cognitivo, cuando la causa es la interpretación errónea, por parte del cerebro, de las señales que el ojo le envía.
Al mirar el tablero nos parece que hay puntos negros, pero no los hay.
Fig. 9 Ejemplo de un juego mental realizado.
El interior parece moverse (Ilusión de Ouchi).
Fig. 10 Ejemplo de un juego mental realizado .
Las dos líneas horizontales tienen el mismo ancho (Ilusión de Müller-Lyer).
Fig. 11 Ejemplo de un juego mental realizado.
Las líneas diagonales son paralelas.
Fig. 12 Ejemplo de un juego mental realizado.
Los círculos del centro son del mismo tamaño
Fig. 13 Ejemplo de un juego mental realizado.
Los filósofos fueron los primeros en estudiar el origen de las percepciones: unos mantienen la teoría de que se trata de una reacción intuitiva e innata, mientras que otros creen que es fruto del aprendizaje y de la acumulación de experiencias.
Dar a conocer y comprender la percepción de los juegos mentales tras explicaciones gráficas y orales
Dar a conocer y comprender la percepción de los juegos mentales tras explicaciones gráficas y orales.
Si conocemos la percepción de los juegos mentales entonces se podría agilizar el cerebro para completar y comprender mejor los juegos mentales.
Investigación documental
Para este proyecto se realizó una investigación documental, se visitaron dos bibliotecas: Prof. Narciso y José María Morelos y Pavón.
En estos dos lugares obtuvimos la siguiente información:
¿Qué es la percepción?
Es el mecanismo individual que realizan los seres humanos que consiste en recibir, interpretar y comprender las señales que provienen desde el exterior, codificándolas a partir de la actividad sensitiva. Se trata de una serie de datos que son captados por el cuerpo a modo de información bruta, que adquirirá un significado luego de un proceso cognitivo que también es parte de la propia percepción.
¿Qué son los juegos mentales?
Es una forma lúcida e interesante de estimular las funcionalidades del cerebro, haciendo que las habilidades del mismo aumenten y así mejorar las capacidades intelectuales de un ser humano.
Investigación de campo
Realizamos juegos mentales a 5 personas.
Uno de los juegos fue de comprensión si una viuda perdió su cartera, su bolso y a su perro. ¿Qué perdió primero?
Mientras que la otra prueba fue visual con unas fichas parecidas a los antecedentes.
Tras los juegos mentales que le realizamos a personas diferentes obtuvimos curiosas respuestas:
Los participantes se sorprendieron tras visualizar los juegos mentales, e incluso creían que era mentira. Esta investigación comprueba que la mente nos puede engañar.
Realizamos juegos mentales a niños y adultos y pude observar que para contestar este tipo de juegos deben utilizar la concentración, repetición en algunas ocasiones de las preguntas, imaginación y posteriormente dan una respuesta.
Pudimos comprobar que los adultos tardan más en visualizar las respuestas correctas que un niño. Sin embargo, algunos adultos que siguen ejercitando su cerebro contestan al mismo tiempo que un niño. Cabe mencionar que los niños ejercitan continuamente su cerebro por los estímulos que reciben en la escuela o bien con la tecnología a diferencia de un adulto.
Finalmente comprobamos que el proceso que investigamos en nuestros antecedentes se cumplen y es la vista la primera en mandar la señal al cerebro para que éste descifre el juego mental. Por lo anterior es importante que ejercitemos nuestro cerebro con este tipo de ejercicios que le ayudaran a resolver situaciones y acertijos de manera mas rapida y poder encontrar diferentes soluciones, además si lo trasladamos a nuestra vida personal y nuestro cerebro está ejercitado podremos resolver con mayor facilidad problemáticas que se enfrenten en nuestro día a día.
rafía